En miras de que los proyectos de jugadores importantes en el RenovAr se están imponiendo a gran escala y los proyectos de autogeneración distribuida se desarrollan a baja escala, el Ingeniero Nicolás Brown reflexionó acerca de la necesidad de una figura intermedia “Si un grupo de vecinos pone una central generadora lo que les quedaría sería venderla a través del mercado mayorista, sin poder venderse esa energía a sí mismo”, sostuvo Brown en conversación con Energía Estratégica, apelando a dejar en claro que existen interrogantes aún sobre los que hay que trabajar.
Con respecto a generación distribuida, desde su posición como consultor y asesor del Cesus esbozó su opinión sobre del proyecto de ley y puso atención a la reglamentación para poder aspirar el éxito en el proceso. ¿Cómo se encuadran los pequeños proyectos de energía distribuida? ¿cómo funciona en otros lados? ¿cuál es la realidad en Argentina? y ¿cómo reaccionará el mercado a la implementación de los proyectos de RenovAr?
Sobre eso, avanzó sobre las ventajas y desventajas que tiene la reglamentación, sobre cuál es la tendencia mundial y cómo vienen las consultas sobre la instalación de módulos para generación distribuida.
Avanzando con la conversación, Brown mencionó su interés en los módulos de la energía solar fotovoltaica, y detalló, por otro lado, el proyecto de Urbanización de Villa 31 del cuál participa y en el cuál busca lograr eficiencia energética para cubrir necesidades concretas.
Para finalizar, respondió a la pregunta sobre los puntos que serían los que más interesan en la industria, desde su opinión como docente en la UNTREF.
“Hay que avanzar en muchos frentes al mismo tiempo y hay que avanzar rápido porque Argentina está atrasada” declaró Brown, y continuó diciendo que el tema normativo y el financiamiento se verían relegados por lo que optó por llamar “clave” a la hora de avanzar en la industria; de ahí que los temas de la mano de obra y la capacitación de la gente fueran con los que decidió concluir, para referirse a cursos formativos abordados desde distintas áreas como la legal, la financiera o de desarrollo de proyecto, entre otras, vinculadas directa o indirectamente a la generación de energías renovables.

Respecto al proyecto de urbanizacion de la Villa 31, es muy difícil pensar en programas de eficiencia energética escalables (hasta ahora solo se concretaron proyectos piloto o esporádicos) si no son empujados por los mismos vecinos. Al día de hoy, estos no tienen una motivación ambiental ni económica para plegarse a reducir su consumo.
No creo que la ley prohiba explicitamente instalar sistemas off grid, con baterías para autoabastacerse, aunque sea en forma parcial.
Es muy dificil que mas alla de ejemplos visuales, algo de esto prospere y democratice la generacion y acceso a la energia, si las instalaciones de energia renovable distribuida (ej solar) de pequenios usuarios residenciales, que son el 40% del consumo electrico del pais, tienen gravamenes de aduana del 50% y del 21 % de iva para la mayoria de los productos que son importados o con componentes importados. Quedan con un repago imposible y ninguna pyme puede instalar en baja potencia y tener algo de rentabilidad. Mientras que los grandes proyectos de renovables del mercado mayorista, de grandes inversores de las utilities y sus distribuidoras asociadas cuentan con alicuotas cero en aduana por la ley de fomento a renovables. Porque no se incluyo el mismo fomento equitativamente en la ley de distribuida desfavoreciendo la instalacion solar del pequenio usuario lo que electrificaria el pais y daria independencia energetica, totalmente a contramarcha del mundo desarrollado?