Después de la primera audiencia de conciliación entre Impsa y la UOM, las gestiones para sostener financieramente a una de las empresas icónicas de Mendoza, en crisis, se aceleran.
Al punto que ayer mismo, ejecutivos y dirigentes sindicales firmaron la documentación para elevar a la Nación que justifiquen la llegada de subsidios de Recuperación Productiva (Repro), lo necesario para solventar entre 15% y 20% del salario de más de 1.000 trabajadores de la compañía en la provincia, equivalente a más de $ 2 millones.
No hay tiempo que perder. Por eso, luego de que mañana vuelvan a reunirse las partes en Mendoza, el martes 9 deberá considerarlo (y aprobarlo) la mesa interministerial que a nivel nacional conforman los ministerios de Industria y de Trabajo con la AFIP.
Será una ayuda para inyectar a razón de $ 2 mil por cada sueldo, en principio por 3 meses; a cambio de esa dosis de oxígeno, Impsa debe intensificar la búsqueda, con aval oficial y gremial, de proyectos energéticos para reposicionarse y así reactivar el nivel de productividad de su planta en Godoy Cruz, hoy al 40% de su capacidad plena.
“Aceptamos suspensiones pero no queremos despidos. Vamos a presentar diversas propuestas para articular cualquier solución válida, teniendo en cuenta que existe un riesgo empresarial que no debe trasladarse a los trabajadores; es un esfuerzo por un beneficio”, señaló el secretario general de la UOM en Mendoza, Luis Márquez, quien hoy mantendrá un encuentro a puertas cerradas con funcionarios en Casa de Gobierno, previo a la nueva audiencia prevista para mañana jueves.
Si bien el sindicato rechazó el pedido de que se declarara en crisis para justificar un ajuste, Márquez ya mantuvo contactos con el titular de la CGT oficialista, Antonio Caló y con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, a fin de facilitar la llegada de subsidios.
En un borrador a presentar el jueves como medidas transitorias, aparecen la reducción de jornadas de 8 a 6 horas, y los turnos diarios, de 3 a 2. Una tercera opción, de ser inevitable ante la falta de asistencia en tiempo y forma, sería recurrir a suspensiones con el pago del 80% de los sueldos.
Entre La Rosada y Portezuelo
Impsa presentó ante la Subsecretaría de Trabajo documentación (balances, situación operativa) que, con visado del gremio, será enviada a Buenos Aires para obtener el Repro. Si bien hay 215 puestos en riesgo de despidos, la presentación, legitimada por la autoridad laboral, incluye el total, o sea, 1.075.
A su turno, el subsecretario de Trabajo, Rubén Boris, justificó la asistencia financiera para todo el personal “porque no es lo mismo para su estructura de costos actual Repro para 200 que para la totalidad. Le daría mucho más aire para buscar obras, teniendo en cuenta que es una empresa importante para la Provincia y el efecto derrame que tiene para muchas pymes”.
Directivos mantuvieron ayer en Buenos Aires una serie de reuniones en la Casa Rosada, en medio de gestiones que ya llegaron al ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y la jefa de la cartera de Industria, Débora Giorgi.
Cabe recordar que el grupo viene de quedar relegado de la licitación de la obra hidroeléctrica Néstor Kirchner, en Santa Cruz, a manos de capitales chinos, y mientras culmina la represa de Tocoma en Venezuela por U$S 600 millones que no termina de cobrar, tampoco atraviesa su mejor momento en Brasil ni asoman grandes proyectos a corto plazo.
Como lo remarcó el responsable de Relaciones Institucionales, Ismael Jadur, “se está atravesando una verdadera crisis financiera y no es fácil afrontar algún tipo de exigencia”. De ahí que tanto desde el Ejecutivo provincial como en la UOM asuman la necesidad de intermediar para facilitar la adjudicación de obras, con Portezuelo del Viento en la mira.
“Van a continuar gestiones empresariales para buscar obras en distintos países del mundo. Mientras, la condición es recurrir a alternativas para que no haya despidos”, reafirmó Boris.
El caso Impsa es el más resonante, pero no son pocas las empresas que en la misma línea solicitaron acogerse al procedimiento de crisis, con una primera medida propuesta: la reducción del 20% de la jornada laboral. De hecho, de 7 en total, ayer tuvieron su audiencia de conciliación 3 agencias de publicidad, a las que les seguirán esta semana: una clínica privada, otra de servicios de limpieza y una metalmecánica que emplea a 55 trabajadores.
Fuente: Los Andes
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