La Comisión Reguladora de Energía (CRE) de México publicó los nuevos requisitos para la adquisición de Certificados de Energías Limpias (CEL) de cara al 2023 y allí definió un porcentaje mínimo del 13.9%, misma cifra que se planteó anteriormente para el año corriente.
Por ello, y considerando que el país anunció que duplicará su capacidad de generación renovable en los próximos ocho años y la reducción de más emisiones de gases de efecto invernadero, desde el sector energético de México manifestaron algunas irregularidades en la formalidad de la publicación y el retraso que podría tener el porcentaje establecido.
Alberto Campos, senior energy manager de Edison Energy, sostuvo que “sorprende” que dicho valor para los CEL lo diera a conocer la CRE, cuando es una facultad de la Secretaría de Energía (SENER), y que “el mensaje que manda la SENER es que se aplicará ese 13.9% pero que el siguiente año lanzará el requisito”.
“Una vez que la Secretaría de Energía actualice el requisito, la CRE procederá a utilizar el nuevo valor a partir de la fecha en que surta efectos la emisión del mismo, sin que implique la posibilidad de realizar ajustes retroactivos”, remarcaron desde la Comisión Reguladora de Energía.
“Es decir, es un requerimiento y meta temporal. Y si, por ejemplo, lo lanzan en marzo del 2023, los primeros tres meses del año se aplicaría ese 13.9% y posteriormente haría lo propio el nuevo valor que determine la SENER”, explicó el especialista en conversación con Energía Estratégica.
Asimismo, para Campos también quedaron desactualizadas las obligaciones definidas tras los compromisos climáticos que México adquirió durante la 27ª edición de la Conferencia de las Partes (COP 27) y que se requieren mecanismos como los Certificados de Energía Limpia para fomentar la implementación de tecnologías sustentables.
“En su momento se hicieron análisis y se mencionó que para el 2023 se necesitaría un requisito entre 16% y 18% para continuar con la línea establecida. Por lo que, ahora, el 13.9% se quedaría corto al actualizar las metas”, apuntó el senior energy manager de Edison Energy.
“Se incrementaron los objetivos pero los CEL se quedaron estancados. Y si se quiere cumplir con las nuevas metas, la política energética también debe dar un giro, como aumentar la generación distribuida, hacer acciones en temas de subastas, electromovilidad y más”, agregó.
La continuidad del mercado
Los Certificados de Energía Limpia son incentivos económicos para las centrales eléctricas renovables, dado que hay una obligación por parte de los consumidores debido a las metas de transición energética por parte de estos últimos.
Ante ello, el mercado de los CEL continúa operando y según la última información del gobierno de México, en lo que va del año ya se entregaron 17,497,057 (hasta agosto 2022), mientras que el precio se mantiene similar al de febrero pasado, entre USD 7 y USD 8.
Así nunca vamos a cumplir con los objetivos de la agenda 2030, por eso hay que dar más apoyo a las empresas privadas como SEMPRA Infraestructura que siguen haciendo energías limpias.
Para que tengamos un proyecto de energías limpias de calidad en el país, lo que de verdad necesitamos es que haya empresas y proyectos como el de Sempra Infraestructurua. Ahí esta el cambio de verdad.
Soy asesor en Ahorro de energía, temas susceptibles como este desconciertan a los industriales ante la incertidumbre que ofrece el mercado de energía en el País. Esperemos que la nueva administración contemple realmente cumplir con los acuerdos de sustentabilidad enmarcados por la ONU y el Climate Change.